La producción de maíz en Aragón se acerca al millón de toneladas

El informe de la campaña 2019 que acaba de publicar Red Arax con la Unidad de Cultivos Herbáceos del Centro de Transferencia Agroalimentaria del Gobierno de Aragón habla de límite de la rentabilidad en el maíz.

Fecha: 31-Mar-2020

Aragón incrementó la pasada campaña un 21% la extensión dedicada al maíz para alcanzar las 99.777 hectáreas y una producción cercana al millón de toneladas. Estas cifras la sitúan por detrás de Castilla y León como la segunda Comunidad Autónoma con mayor superficie en todo el territorio nacional y posiciona a este cultivo cerealista como el más representativo de los regadíos del valle del Ebro.

Pese a este crecimiento y su extensa implantación, “es un cultivo que atraviesa unos momentos complicados desde el punto de vista de la rentabilidad económica, en un problema que viene de lejos”, señala Miguel Gutiérrez, responsable de la Unidad de Cultivos Herbáceos del Centro de Transferencia Agroalimentaria del Gobierno de Aragón.

“Desde la campaña 2013/14 –continúa- nos estamos moviendo en una horquilla de precios que oscilan entre los 170-180 €/t, lo que obliga al agricultor a alcanzar unas producciones superiores a las 10 t/ha para poder cubrir los costes inherentes a un cultivo que requiere de grandes inversiones”.

Gracias a la tecnología, la agronomía, el riego y la fertilización, en los últimos años se ha logrado incrementar de manera “espectacular” el rendimiento de este cultivo, “pero la falta de agua algunas campañas, los veranos calurosos que dificultan una buena floración de la mazorca o los problemas de sanidad vegetal como la araña, que ha tenido una fuerte incidencia en 2019 y que ha provocado una disminución de los rendimientos, hacen del maíz un cultivo de riesgo por su alta inversión”, remarca Gutiérrez.

Sin embargo, “es evidente que es necesario y esencial para la gestión económica de las explotaciones, para el movimiento del sector cooperativo y empresarial y para equilibrar las cuentas globales del sector primario. En Aragón, el agricultor sigue apostando por el maíz”, concluye.

Maíz de consumo humano

De las cerca de 100.000 ha de maíz que en 2019 se cultivaron en Aragón, el 56% se sembraron con variedades transgénicas y el resto fueron de convencionales con destino a pienso animal o consumo humano. En este último aspecto destaca el trabajo de dos empresas bien implantadas en Aragón: entre Liven Agro-Quality Corn de Monzón y Tereos-Syral de Zaragoza  se contrataron la pasada campaña un total de 20.000 ha agrarias para elaborar maíz de palomitas, blanco, amarillo y waxy por un lado y para la fabricación de almidones y glucosa en el caso de la industria zaragozana.

“En 2019 la superficie de maíz de consumo humano fue del 20% sobre el total de las hectáreas sembradas y queda claro el valor de este tipo de cultivos en nuestra comunidad. La rentabilidad no sólo hay que buscarla desde la gestión de gastos en las explotaciones y de los insumos que aplicamos, también hay que encontrarla en estas variedades que ofrecen a nuestras producciones un plus de precio y calidad”, entienden desde el Centro de Transferencia Agroalimentaria aragonés.

En cuanto al manejo agronómico del cultivo en la última campaña cabe destacar que se mantuvieron los porcentajes de maíz de primera siembra con respecto al rastrojero: 67.520 ha frente a 32.258 ha. “La provincia de Huesca albergó el 91% del maíz de segunda cosecha por el gran peso que tiene el regadío a presión en su agricultura. En estos años está rotando con la cebada, con buenos precios y rendimientos en las últimas campañas, y con el guisante para congelado o para seco. Esta alternancia está consolidando las cifras finales de la superficie del maíz”, concluye Miguel Gutiérrez.

En estos momentos Aragón produce el 24% del maíz que se cosecha en España. A partir de estas semanas los agricultores deberán orientar el sentido de sus cultivos de verano por lo que el Centro de Transferencia Agroalimentaria de Aragón pone a disposición de todos los profesionales los ensayos de variedades por zonas agroclimáticas de la campaña 2019 realizados con la colaboración de las cooperativas agrarias comarcales en el marco de coordinación de la Red Arax.