Estados Unidos se consolida como primer mercado mundial del vino en valor

Durante el primer semestre de este año 2022, Estados Unidos aumentó sus importaciones de vino un 4,6 % en volumen y un 7,1 % en valor, el mejor hasta la fecha, ya que supone un total de más de 693 millones de litros de vino y cerca de 3500 millones de dólares en facturación.

Fecha: 01-Sep-2022

Estas cifras, ofrecidas en un reciente informe, Importaciones de vino en Estados Unidos – Primer semestre 2022, publicado por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), consolidan a Estados Unidos como primer mercado mundial de vino en valor, además de superar a Alemania como principal importador también en volumen.

No obstante, el ritmo de crecimiento se ha frenado respecto a 2021, aunque según se matiza en el informe, “entonces comparábamos con un 2020 muy negativo en términos de valor, debido a la pandemia de COVID-19 y a los Aranceles Trump contra algunos vinos envasados europeos, factores que conllevaron fuertes restricciones comerciales”.

El mercado del vino en Estados Unidos

Durante esta primera mitad de 2022 el mercado estadounidense solo redujo su gasto en vino en el formato bag-in-box, con el espumoso como el que más creció. Sin embargo, bag-in-box y, en menor medida, envasado, cayeron en volumen, con el granel como el que más creció en este aspecto, y el único que bajó de precio. El vino tranquilo envasado lideró las importaciones de forma clara, seguido del granel en litros y del espumoso en dólares.

Respecto a la procedencia del vino importado, Italia, Canadá y Francia pierden cuota como principales proveedores en volumen, al registrar caídas. En cambio, los cuatro siguientes —Chile, Australia, Nueva Zelanda y Argentina— crecieron a un ritmo excelente. Sudáfrica fue el que más creció entre los analizados, aunque a un precio muy inferior. En términos de valor, Francia lideró las compras, seguido de Italia, y entre ambos suman casi el 70 % del gasto total en vino realizado por Estados Unidos, seguido de lejos por Nueva Zelanda.

En cuanto al vino español, pierde cuota al registrar caídas a un precio medio que subió un 7,3 % y fue muy superior a la media de mercado, característica poco común en el comercio mundial de vino. España es el séptimo proveedor de vino a Estados Unidos en volumen, pero el cuarto en facturación, que es el único aspecto que registró pérdidas, junto a Portugal, entre los diez primeros vendedores.