Por cultivos, en trigo blando se superarán los 5,1 millones de toneladas, en cebada 6,6 millones de toneladas, en maíz 3,8 millones de toneladas, en trigo duro 668.120 toneladas, en avena 889.191 toneladas, centeno 181.514 y triticale 739.649 toneladas, detalla Cooperativas en la que es su segunda estimación de la cosecha para este año.

La organización ha incrementado en medio millón en la producción total anual respecto a la primera estimación que hizo a mediados de junio (con 17,6 millones de toneladas), lo que a su juicio se explica por "una mejora de los rendimientos esperados".

"Sin embargo, el sector cerealista cooperativo considera que la cosecha definitiva está pendiente del final del ciclo del maíz, debido a altas temperaturas y a las dudas sobre la dotación de riegos en algunas comunidades autónomas, que pueden hacer varias los rendimientos estimados", ha abundado Cooperativas en un comunicado.

Cooperativas ha indicado que la caída de la producción este año se debe al estrés que han sufrido los cereales a lo largo de todo su ciclo vegetativo, debido principalmente a la falta de lluvia y al calor de mayo y junio.

La organización ha recordado que una cosecha corta no cubre las necesidades de consumo, una realidad que supone un "gran reto" para el sector cerealista español porque "necesitará complementar la producción nacional con importaciones para abastecer las necesidades de la importante cabaña ganadera nacional".

Por eso, considera "imprescindible" una buena y organizada campaña de comercialización, que consiga "dar el valor que tiene el cereal en la cadena", ha concluido Cooperativas.