El precio de la lechuga se ha incrementado en el mes de agosto en cerca de un mil por cien, en concreto un 942 por ciento, por llevarla desde las zonas de producción hasta los supermercados, según el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) de los alimentos que elabora cada mes la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG).

El productor español de lechuga ha percibido durante el mes de agosto un precio medio de 0’12 euros/kilo, mientras que al consumo se ha vendido a 1’25 euros por kilo, multiplicando su precio por 10’42 según refleja el IPOD de junio.

De entre los datos aportados por el IPOD de agosto destacan también los márgenes comerciales que se han aplicado a la cebolla, al ajo, la patata, el melón o la sandía.

En el caso de la cebolla, el margen con el que se ha gravado a esa hortaliza desde lo cobrado por el agricultor hasta la cantidad final pagada por el consumidor ha sido del 665 por ciento, ya que el productor la cobró a 0’17 euros por kilo y el consumidor tuvo que pagar un precio medio durante el mes de agosto de 1’30 euros por kilo, 7’65 veces más.

El margen comercial que se ha aplicado al ajo ha sido del 639 por ciento. Los productores cobraron cada kilo de ajo a 0’79 euros mientras los consumidores lo pagaron a 5’84 euros, 7’39 veces más.

En cuanto a la patata, el margen comercial que se le ha aplicado en agosto por distribuirla ha sido del 548 por ciento. El productor la ha cobrado a 0’21 euros por kilo vendiéndose al llegar a los consumidores a 1’36 euros por kilo, multiplicando el precio en origen por 6’48.

El melón aumenta su precio en 5’25 veces desde el productor al consumidor, con un precio medio pagado al agricultor de 0’24 euros por kilo, mientras que el consumidor lo ha pagado a 1’26 euros/kilo, un 425 por ciento más.

El margen comercial que se ha aplicado a la sandía ha sido de un 407 por ciento, ya que se pagó al agricultor a 0’15 €/kg, subiendo su precio al llegar al consumidor hasta 0’76 €/kg., 5’07 veces más.

También resalta el margen comercial aplicado al calabacín, que en agosto ha sido de un 370 por ciento, con un precio medio pagado al agricultor de 0’27 euros por kilo que se incrementó al llegar al consumo hasta un precio medio de 1’27 euros/kilo, 4’7 veces más.

El pepino aumentó su precio medio en un 270 por ciento desde la producción al consumo, con un precio medio pagado al agricultor durante junio de 0’43 euros por kilo, pagándolo el consumidor a 1’59 euros por kilo, 3’7 veces más.

Los consumidores españoles de tomate para ensalada han pagado en el mes de agosto 3’43 veces más de lo que han percibido los productores, ya que el precio medio pagado al agricultor por el tomate ha sido de 0’53 euros por kilo, mientras que el consumidor lo ha pagado a 1’82 euros/kilo, lo que representa un margen comercial del 243 por ciento.

Para el pimiento verde el margen comercial ha sido del 240 por ciento, ya que el agricultor lo ha cobrado al precio medio de 0’70 euros por kilo llegando a los mercados a 2’38 euros/kilo como precio medio, 3’40 veces más que en origen.

En el caso del pimiento rojo el margen comercial fue del 231 por cien. El productor recibió 0’65 euros por kilo, vendiéndose al consumo a 2’15 euros/kilo, por lo que aumentó su precio en 3’31 veces.

El margen comercial aplicado a la berenjena ha sido de un 100 por cien, ya que el productor percibió en agosto un precio medio de 0’86 euros por kilo, llegando a los mercados a 1’72 euros/kilo, 2 veces más de lo percibido por los agricultores.

Otras frutas

La ciruela se pagó al agricultor a un precio medio en agosto de 0’47 euros por kilo, precio que se multiplicó por 6’21 al llegar al consumidor que pagó por cada kilo de ciruela 2’92 euros, un 521 por ciento más.

El melocotón aumenta su precio en 3’62 veces desde el productor al consumidor, con un precio medio pagado al agricultor de 0’65 euros por kilo, mientras que el consumidor lo ha pagado a 2’35 euros/kilo, un 262 por ciento más.

El precio medio de la nectarina pagado al agricultor en agosto ha sido de 0’70 euros por kilo, que se incrementó un 243 por ciento al llegar al consumidor, que la pagó a 2’40 euros/kilo, 3’43 veces más.

El margen aplicado al plátano fue del 205 por ciento. El agricultor cobró por kilo de plátano 0’73 euros por kilo y el consumidor lo pagó a 2’23 euros/kilo, 3’05 veces más.

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