Tendencias y vanguardia en el sector alimentario, según los expertos

Atender las necesidades de un consumidor cada vez más exigente, de gustos cambiantes e hiperconectado, la búsqueda de ingredientes alternativos como microalgas, insectos y proteínas, informar sobre el producto de una forma clara, atractiva y completa, diseñar packagings más sostenibles, ofrecer soluciones cada vez más personalizadas…

Fecha: 31-Jan-2020

Son algunos de los grandes retos a los que se enfrenta el sector alimentario en un futuro muy próximo, y sobre los más de veinte expertos en diferentes áreas del Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA) han querido reflexionar en una serie de artículos, resultado de varias sesiones de trabajo en la que se abordaron siete grandes temas para tratar de trazar una visión sobre las exigencias que el sector alimentario tiene por delante.

Tendencias y vanguardia en el sector alimentario

Sostenibilidad, salud, conveniencia… y personalización como horizonte: así será el consumidor de 2020. La industria de la alimentación tiene ante sí el enorme desafío de satisfacer a un consumidor cada vez más sofisticado, de gustos cambiantes y que, en un mundo hiperconectado, no rehúye el mostrar abiertamente sus creencias y principios y en tomar decisiones de compra en base a ellos. En ese escenario, gana enteros el concepto de personalización, cada vez más presente y al que la industria se va aproximando gracias a las tecnologías avanzadas de gestión de datos. Además, siguen vigentes los drivers de referencia como la salud, la sostenibilidad y la conveniencia.

La industria alimentaria ante un entorno cambiante: tecnologías emergentes e innovación colaborativa como oportunidad. Cambios de tendencias a velocidad de vértigo, consumidores de gustos variables, nuevos desarrollos…. Las empresas del sector de la alimentación encaran a diario un paisaje cambiante. El peso de tecnologías facilitadoras como la Inteligencia Artificial o el Big Data supondrá una oportunidad para buscar una mejora de la competitividad. A la par, la pujanza y el dinamismo de las startups seguirá aportando nuevos horizontes de innovación a la industria alimentaria.

En busca del ‘oro alimenticio’: los ingredientes alternativos que rastrea la industria. Frutos de árboles exóticos, microalgas e incluso insectos. Las empresas de alimentación tienen ante sí el reto de subirse a la ola de las tendencias de ingredientes emergentes. Su producción sostenible y sus propiedades nutricionales son el gancho al que hay que unir la viabilidad económica y la predisposición del consumidor a un cambio cultural. Presente y proyección que muestran algunos de esos nuevos ingredientes.

Lo que viene en seguridad alimentaria: control oficial actualizado y a la espera de conclusiones sobre contaminantes. Crisis como la de la listeria en España abren el debate sobre qué medidas pueden tomar tanto la industria como las administraciones en materia de seguridad alimentaria. 2020 trae consigo un nuevo reglamento sobre control oficial en Europa que prevé un mayor foco en el fraude alimentario y una armonización de los sistemas de información, entre otros aspectos. Mientras tanto, se sigue a la espera de conclusiones sobre los efectos de residuos de plaguicidas o contaminantes.

Hacia el clear label: informar a un consumidor cada vez más exigente de forma clara, atractiva y completa. Los datos que revela el etiquetado de los productos alimentarios influyen cada vez más en las decisiones de compra. Ante un consumidor que va ganando en consciencia y que demanda claridad, la oportunidad que encara en este 2020 la industria alimentaria pasa por posicionarse en ese escenario, apostando por una forma de ofrecer la información asimilable, atractiva y completa.

Alimentación y salud, binomio inseparable: nutrición personalizada y nuevas formulaciones adaptadas en el horizonte. La ciencia y la tecnología siguen abriendo nuevas vías en busca de soluciones innovadoras para mejorar el perfil nutricional de los alimentos. Una tendencia que ya abrazan no solo los consumidores, sino también las administraciones y la propia industria alimentaria. Además, la investigación en disciplinas incipientes como la nutrigenómica o nutrigenética irá allanando el camino hacia una nutrición cada vez más precisa y adaptada a nivel individual.

Técnicas de control, detección y conservación más precisas y cada vez más implantadas. Los desarrollos de tecnologías de control, análisis, detección y conservación avanzan hacia un escenario de mayor precisión y alcance. La industria alimentaria encara el desafío de implantar en la medida de lo posible estos avances en sus líneas de producción y, de esa forma, ir mejorando sus procesos en materia de calidad y la seguridad alimentaria.