Los cambios en legislación alimentaria que llegarán con el nuevo año

Nuevas normativas sobre productos como aceites de oliva y vegetales, conservas vegetales, caldos, consomés, sopas y cremas, galletas, aperitivos… una mayor transparencia en la información al consumidor, incremento de los controles europeos en temas como fraude, contaminantes, plaguicidas…

Fecha: 09-Jan-2020

Tags: normativa

Son algunas de las previsiones en cuanto a la legislación alimentaria para 2020 que avanza José María Ferrer, responsable del departamento de Derecho alimentario del centro tecnológico AINIA, para quien “la situación actual ha evolucionado escasamente, en tanto que la mayoría de las normas de calidad pendientes de actualización continúan en la misma situación que estaban hace un año, por lo que la retrospectiva no nos da una imagen muy positiva”.

Legislación alimentaria para 2020

En este sentido, en opinión de José María Ferrer este nuevo año debería traer cambios en la legislación de aspectos como:

  • Por su trascendencia, la primera norma de calidad en ser revisada, debería ser la correspondiente al aceite de oliva, de forma que casi cuarenta años después se pueda disponer de una nueva norma de calidad.
  • Las conservas vegetales, que también deben ser objeto de una actualización legislativa focalizada en tres aspectos primordiales: la simplificación de los productos y formas de presentación, la adaptación de los defectos y sus tolerancias al desarrollo tecnológico de los procesos de elaboración, y la actualización de la información alimentaria facilitada al consumidor.
  • Respecto a productos que ya deberían haberse actualizado en 2018 y 2019: aceites vegetales, caldos, consomés, sopas y cremas, galletas y las patatas fritas y productos de aperitivo.

En cuanto a los cambios que deberían venir por vía de la Unión Europea:

  • Control oficial. Medidas legislativas vinculadas a la lucha contra el fraude alimentario, derivadas de la entrada en vigor del Reglamento 625/2017 que es de aplicación desde el pasado 14 de diciembre de 2019.
  • La información al consumidor seguirá siendo un eje de la legislación alimentaria con nuevas disposiciones que desarrollará el Reglamento 1169/2011. Un ejemplo lo veremos en una futura regulación sobre el origen de los productos cárnicos, más allá de lo legislado en 2013 y de la aplicación del Reglamento 775/2018, a partir del 1 de abril de 2020.
  • Evolución de los parámetros habituales de control como los contaminantes, los límites máximos de residuos de plaguicidas y los controles microbiológicos, entre otros factores.

Finalmente, según el responsable de Derecho alimentario de AINIA, también habrá que prestar atención a posibles cambios en otros aspectos como:

  • Medidas legislativas vinculadas a los materiales en contacto con los alimentos, tanto en el ámbito nacional y autonómico, en conexión con la Directiva 904/2019 de plásticos de un solo uso; así como con otros elementos directamente relacionados con los materiales y las medidas que puedan plantearse para minimizar su impacto ambiental.
  • Evolución de otras cuestiones legales, relacionadas con nuevos alimentos, ampliación de contaminantes objeto de control, modificaciones sobre aditivos alimentarios o el control sobre las sustancias medicamentosas que se emplean en productos de origen animal.