La toxicidad de un plaguicida se puede incrementar o disminuir por la exposición simultánea o consecutiva con otra sustancia química.

Hasta el momento, las evaluaciones sobre los riesgos para la salud se han realizado de manera general sobre los compuestos individuales de plaguicidas en alimentos, pero últimamente la EFSA y también las grandes cadenas de la distribución comercial están haciendo hincapié en estudios de evaluación de la acumulación de múltiples residuos. En este artículo analizamos qué se está haciendo en este ámbito y cómo se avanza en la detección multi-residuo en los laboratorios de control de alimentos.

Fecha: 22-Jun-2017

Fuente: AINIA

La toxicidad de un plaguicida se puede incrementar o disminuir por la exposición simultánea o consecutiva con otra sustancia química. Los efectos combinados entre varios plaguicidas pueden ser aditivos, sinérgicos, potenciadores o antagónicos.
Las evaluaciones sobre los riesgos para la salud se han realizado de manera general sobre los compuestos individuales, pero últimamente se está haciendo hincapié en estudios de evaluación de la acumulación de múltiples residuos (CRA) y así, por ejemplo, la EFSA indica que debe revisarse la metodología para reducir la incertidumbre de las evaluaciones. El proyecto europeo ACROPOLIS aborda este tipo de evaluaciones y pretende crear un marco donde se recoja la información y pueda ser utilizada para realizar las evaluaciones de riesgos.
Actualmente la evaluación de riesgos acumulativos de múltiples residuos de plaguicidas no forma parte de la gestión de riesgos para la seguridad alimentaria, lo que significa que siguen sin identificarse los posibles factores de riesgo. La falta de una metodología en sí constituye la principal preocupación entre los colectivos de consumidores europeos.
Según un estudio elaborado por la UE en 2006, el 27 % de los alimentos analizados contenían múltiples residuos de plaguicidas.
Destacar también, por otro lado, que la propagación de plagas se ve afectada, entre otros, por el calentamiento global, la forma de los cultivos, etc., de forma que según un estudio la velocidad de propagación se incrementa en casi tres kilómetros por año, lo que implicaría a medio y largo plazo el incremento del uso de plaguicidas.
Las autoridades danesas han publicado un estudio donde se analizaron plaguicidas en más de 17.000 muestras. En dicho estudio se evidencia que en las muestras procedentes del exterior hay más pesticidas que en las muestras internas. Por otra parte las muestras con contenidos superiores a los marcados en la legislación fueron el 2.6 % del total.
En el mismo sentido, recientemente se ha publicado en la EFSA el informe sobre el análisis de plaguicidas en alimentos. En este estudio se analizaron más de 77.000 muestras, y en la misma línea que el estudio danés tan sólo un 1.6 % de los resultados superaban el límite legislativo, siendo las procedentes de terceros países las que tenían una mayor proporción (7.9 %) de resultados incorrectos.
En ambos estudios se indica que en la mayoría de las muestras positivas, no hay un único compuesto sino que hay mezclas de varios de ellos. Esto es debido a los “cócteles” de plaguicidas que se utilizan para tratar los campos.
A medio y largo plazo, parece ineludible el uso de pesticidas con el fin de frenar las plagas y que pueda generase suficiente alimentos para la población mundial.
Aun así la proporción de productos que superan los límites establecidos en la legislación es baja, y de las evaluaciones realizadas por las autoridades sanitarias se concluye que no hay peligro para la salud en un plazo largo.
De la misma manera que se han regulado los plaguicidas individuales, cabe la posibilidad de que, una vez realizados los estudios de evaluación de riesgos para la acumulación de múltiples compuestos, se regulen algunos tipos mezclas. A medio plazo sería previsible el desarrollo de requisitos legales relacionados con restricciones de uso, y limites máximos admisibles de uso para plaguicidas aplicados de forma conjunta.
Plaguicidas en alimentos y sistemas de calidad de la distribución comercial

Las cadenas de supermercados europeas ya están tomando medidas en el control y restricciones de los límites máximos de plaguicidas en los alimentos que comercializan y no solo tienen criterios propios (más restrictivos que los legales) para los plaguicidas de forma individual, sino que también los tienen en ocasiones para la suma de porcentajes de LMR (limites legales individuales) de los plaguicidas detectados, a los PRP (limites derivados del “pesticides reduction plan”), para las sumas de los porcentajes de las dosis máximas admisibles desde el punto de vista toxicológico (ARfD), así como al número total de plaguicidas detectados o al uso de algunos de ellos mediante una lista de excluidos o “black list” (aún tratándose de plaguicidas cuyo uso está permitido legalmente, ellos no los permiten en sus protocolos de calidad exigida).
Laboratorios de control de alimentos: Métodos de detección de plaguicidas acreditados por ENAC

Los laboratorios de control de AINIA, AINIALAB, llevan años trabajando para lograr métodos de detección de plaguicidas más eficaces, seguros y rápidos. Nos hemos especializado, además, en el análisis multi-residuo, dado que es previsible que haya restricciones a las sumas de múltiples residuos de plaguicidas en alimentos y no solo a la presencia de cada uno de forma individual.
Nuestros ensayos de control de plaguicidas están acreditados por ENAC y permiten la detección de más de 700 sustancias activas en frutas y hortalizas, frutos secos, especias, té e infusiones.
Trabajamos mediante métodos acreditados por ENAC por cromatografía de gases con detector de espectrometría de masas (GC-MS/MS); ensayo con el que podemos detectar hasta 268 sustancias activas distintas.
También trabajamos mediante métodos acreditados por ENAC de cromatografía líquida con detector de espectrometría de masas (LC-MS/MS), pudiendo detectar en un mismo ensayo hasta 391 materias activas distintas.
Además, tenemos a punto métodos específicos para la detección de clorato y perclorato, Etefon, Fosetil-Al y ácido fosfónico, Gliflosato y glufosinato, Hidracina maleica, Plaguicidas ácidos (10) y plaguicias Quats (4).
Atendiendo a la demanda del sector, nuestros laboratorios aportan información en la que se detallan el número total de plaguicidas detectados, además de otra información complementaria si es requerida, relativa a:
LMR (Límites Máximos de Residuos establecidos)
PRP (limites derivados del “Pesticides Reduction Plan”)
ARFD (información toxicológica)
Black List (lista de plaguicidas no admitidos)
Esta información es la que demandan y utilizan las cadenas de supermercados en sus tareas de control de la calidad de productos y proveedores.
AINIALAB continuamente amplía su cartera de parámetros acreditados por ENAC. En la actualidad tenemos más de un centenar de ensayos acreditados por ENAC, lo que nos convierte en uno de los laboratorios de control de alimentos más potentes de nuestro país. Además, estamos reconocidos internacionalmente en más de 30 países, al ser miembros de la red ENAC-ILAC-MRA.
Si necesita un laboratorio de control puntero en la detección de residuos de plaguicidas y acreditado por ENAC, cuente con AINIALAB, podemos ser su laboratorio de confianza.