La climatología condiciona el sector español

La fruta de pepita es un producto habitual en la cesta de la compra. Manzanas y peras están plácidamente instaladas en hogares y lineales. Un estatus que es fruto del trabajo y esfuerzo de un amplio grupo de personas del que forman parte productores, investigadores, técnicos, manipuladores y profesionales del marketing, entre otros muchos. Su finalidad es conseguir que el mejor producto llegue en las mejores condiciones y al mejor precio a la mesa del consumidor. Pero el trayecto no es fácil.

Fecha: 25-Oct-2017

A nivel Europeo, Polonia es el principal país productor de manzanas, seguido de Italia, Francia, Alemania, Hungría y España. En pera, encabeza la producción Italia, y le siguen Países Bajos, Bélgica y España. En nuestro país, Cataluña es la primera productora de fruta de pepita, seguida de Aragón. Entre las dos suman algo más del 80% de la producción nacional. Por su parte, el consumo interior se situó en 2016, según datos del Panel de Consumo Alimentario del Mapama, en 476.842 toneladas de manzana y 238.799 de pera, cifras que suponen sendos descensos del 5,2% y 2,4%, y que incluso se incrementan en los primeros meses de 2017.
La meteorología favorece al sector español
Además de los condicionantes internos y externos, el sector también ha de hacer frente a la cada vez menos previsible meteorología, que ha hecho verdaderos estragos en el conjunto de la Unión Europea en las últimas campañas y que no obstante, este año parece haber favorecido al sector en España. Para la actual, las estimaciones de Cooperativas Agro-alimentarias -materializadas en un informe realizado por sus servicios técnicos con motivo de Prognosfruit-, pronostican para el conjunto de la Unión Europea una caída del 21% en manzanas y del 1% en pera con respecto a la anterior, descenso que se une a los de años anteriores.
En cifras globales, la producción de manzanas en la UE se prevé que esté en 9.343.000 toneladas, y la de peras en 2.148.000 toneladas. Las principales causas de este descenso, apuntan desde la organización, han sido “las intensas heladas durante la floración, así como la sequía de primavera y principios de verano”.
Con respecto a la pera, The World Apple and Pear Association (WAPA) destaca “que el mercado experimentará tendencias diferentes en los países del sur y del norte de la UE, que se reflejarán también en un mayor volumen de Abate y Rocha, mientras que la cosecha de la pera Conferencia se verá mermada”. Señala también que la temporada de la pera comenzará con menor presión. En referencia a las exportaciones, destaca que, aunque han avanzado de forma positiva, los productores aún seguirán sintiendo los efectos del veto ruso.