UPA-UCE alerta de los efectos del cambio climático en la apicultura

La Asociación Sectorial Forestal Gallega (ASEFOGA), en colaboración con UPA-UCE Extremadura, ha informado del proyecto Apicambio que se está llevando a cabo en Extremadura y Galicia con el apoyo de la Fundación Biodiversidad y del Ministerio para la Transición Ecológica.

Fecha: 16-Apr-2019

Tags: apicultura

Fuente: Agrodigital

 Apicambio nace de la necesidad de crear herramientas útiles para la toma de decisiones, tanto por parte de los apicultores como de las administraciones, que ayuden a paliar los problemas generados en el sector apícola por el cambio climático. Este estudio se ha basado en elaborar un conjunto de medidas de adaptación y mitigación al cambio climático del sector apícola extremeño y gallego a partir de entrevistas realizadas a profesionales de este sector.

“Entre los objetivos que perseguimos con este estudio es saber si los apicultores están preocupados por el cambio climático, conocer cómo valora la población las actuaciones que estamos llevando a cabo, así como poder identificar los hábitos y medidas de adaptación puestas en marcha por los profesionales del sector para combatirlo”, expone el responsable apícola de UPA-UCE, Antonio Prieto. Entre las principales conclusiones que arroja dicho estudio destaca que el 100% de los encuestados afirma que le preocupa el cambio climático y, frente a un 30% que cree que nos afectará en el futuro, un 65% mantiene que es ya un problema actual. Todos los profesionales encuestados han coincidido en que las consecuencias del cambio climático ya están afectando al sector apícola extremeño, centradas sobre todo en una disminución de polen y miel.

“Los impactos del cambio climático están poniendo en jaque nuestras producciones agrícolas y ganaderas. La incertidumbre en las condiciones de temperatura y humedad (lluvias irregulares, ausentes o en exceso), en el caso de la apicultura, está afectando a los ciclos florales y la fenología propia de las flores y, con ello, a la estabilidad en la producción de miel y a las condiciones de salud de nuestras colmenas”, mantiene Prieto.

La apicultura es uno de los mejores modelos de producción ganadera sostenible ya que se trata de una actividad respetuosa con el medio ambiente al mismo tiempo que facilita la polinización de las plantas. Sin embargo, está muy condicionada por la climatología y ligada a la trashumancia, donde las abejas necesitan de los recursos naturales a través del polen para satisfacer sus necesidades. UPA-UCE ha destacado que los efectos del cambio climático pueden provocar un desfase entre la fenología de las abejas y las especies polinizadas, aparición de especies exóticas o cambios en la distribución de especies patógenas y su virulencia.

Por ello, ASEFOGA y UPA-UCE han propuesto 8 medidas para paliar los efectos del cambio climático en la apicultura: 1. -Diversificación de productos de la colmena y de las actividades complementarias. 2. -Movilidad, trashumancia y cambios en los asentamientos tradicionales 3. -Aumentar el número de colmenas de cada explotación 4. -Prácticas agroecológicas 5. -Trabajar mediante asociaciones de apicultores o cooperativas 6. -Vigilancia del estado sanitario de las colmenas 7. -Formación y asesoramiento para los profesionales de la apicultura 8. -Mejora en los seguros agrarios para paliar las pérdidas.