Los profesionales del campo somos la base sobre la que sustentar el desarrollo rural

Los profesionales del campo somos la mejor base sobre la que se puede sustentar el desarrollo rural. Pero primero debemos fortalecer esa base para que sea firme e indestructible. Una firmeza que vendrá de la mano de la mejora de la calidad de las producciones y de favorecer la competitividad de nuestros productos en los mercados. Para ser más competitivos debemos aspirar a ser los mejores profesionales, y para ello es vital la formación. UPA Aragón lo sabemos bien y por ello ofrecemos un amplio catálogo de cursos a lo largo del año. En nuestras aulas, diseminadas por todo el territorio aragonés, se han formado más de 1.000 profesionales en el último año, con un creciente número de mujeres.

Fecha: 11-Sep-2018

Fuente: UPA

De la mano de la formación debe ir el rejuvenecimiento del sector agrario, con la incorporación de jóvenes a las explotaciones. Ellos son la savia nueva con la que podremos al fin dar un impulso a la agricultura y la ganadería aragonesas. Aragón es una comunidad autónoma adolecida por el envejecimiento de su población, la dispersión territorial que se dibuja en su mapa geográfico y la falta de vertebración que afecta, de manera especialmente cruda y directa, a sus pueblos. La actividad agrícola y ganadera es la solución a los tres problemas que azotan Aragón, en UPA lo sabemos, y por ello exigimos ante los poderes públicos –a todos los niveles– que la apuesta por el campo aragonés sea real y se plasme en unos presupuestos que no nos abandonen a nuestra suerte, en medidas de apoyo valientes y políticas basadas en el consenso, para que sean estables y contundentes, así como sociales, respondiendo siempre a las necesidades reales de los agricultores y los ganaderos de nuestra comunidad.

Un trabajo de todos

En UPA Aragón trabajamos codo con codo con otras organizaciones y entidades que velan por los mismos intereses que nosotros. Hemos participado en todas las manifestaciones convocadas por AGRIGATE y demás plataformas al grito de “¡Salvemos Teruel!”, para respaldar a nuestros afiliados turolenses, brindándoles nuestro apoyo en su lucha por acabar con las desigualdades que sufre la provincia, la más castigada por la sequía, el éxodo, la falta de servicios y la más penalizada por la actual PAC. También hemos respondido a la llamada de los agricultores, ganaderos y vecinos de las comarcas arrasadas por el desbordamiento del río Ebro y sus afluentes a su paso por Aragón. Y seguimos luchando para que se pongan en valor, siendo objeto de pagos asociados, las zonas más vulnerables, como las áreas de montaña, sobre todo al norte de la comunidad en la provincia de Huesca, para que puedan seguir desarrollando con dignidad sus actividades agrícolas y ganaderas.

Todo este trabajo no podríamos llevarlo a cabo sin todos y cada uno de los profesionales que trabajan en este sindicato agrario. Ellos son la cara visible de UPA, y junto con nuestros afiliados, que aumentan cada año, dan sentido a la organización.

UPA Aragón nació como sindicato agrario para defender la agricultura y la ganadería de carácter familiar. Son estas pequeñas explotaciones las que mantienen activa la economía de los pueblos aragoneses en todas las comarcas, y por lo tanto son ellas el verdadero motor de actividad social y financiera, además de pilar vertebrador para su población.

Afrontar la despoblación, teniendo en cuenta que Aragón es una comunidad con unas características muy especiales, es todo un reto. Solo en la capital aragonesa y su entorno viven 800.000 personas, de 1.308.750 habitantes total. Es decir, a pesar de que el 92% del territorio es zona rural, solo el 16% de los aragoneses vive en él. Y nos preguntaremos por qué; por la falta de servicios y recursos, las malas comunicaciones por carretera y la falta de acceso a internet y banda ancha, el cierre de escuelas, centros médicos, tiendas y bares. Aragón tiene un problema contra el que debemos luchar, y para ello se debe de hacer un análisis global para trabajar de manera conjunta con la Administración pública, las entidades sociales y sobre todo con los habitantes de los municipios que intentan sobrevivir y de aquellos que están en peligro de seguir perdiendo población. UPA Aragón somos parte activa en este trabajo. Sabemos que como sindicato agrario tenemos que conseguir mejorar las condiciones de trabajo de los agricultores y los ganaderos, principales habitantes del medio rural, para que quieran y puedan quedarse en sus pueblos sacando adelante sus explotaciones con unos beneficios dignos y la cobertura de servicios y oportunidades.

Sabemos que no es fácil de entender, que parece que solo debemos trabajar por el campo, pero sin tener en cuenta los servicios en las zonas rurales, nunca podremos luchar contra la despoblación y la desertización de nuestros pueblos, allí donde viven los agricultores con pequeñas explotaciones familiares a los que como sindicato agrario defendemos.

Por supuesto, en nuestros objetivos ocupan un lugar destacado el mantener y mejorar la Seguridad Social Agraria y luchar por una fiscalidad justa que se adapte a los diferentes niveles de renta. UPA Aragón somos una organización que defiende firmemente el cooperativismo como fórmula para la mejora, avance y crecimiento del sector agrario. Así lo hemos demostrado en numerosas ocasiones a través de charlas, conferencias y proyectos de cooperativismo, como en los que hemos participado en varios países latinoamericanos de la mano de Acodea, la agencia para la cooperación a nivel internacional.

Las cooperativas cumplen una doble función, ambas vitales para el mantenimiento de nuestro territorio. Por una parte son elemento indispensable para el desarrollo económico de las zonas rurales, y por otra son un importante motor para la puesta en marcha de iniciativas de carácter social en la población del campo aragonés. El trabajo de las cooperativas es fundamental para que nuestros pueblos sigan vivos, pero también para que nuestros campos sigan siendo productivos y nuestros productos puedan llegar a ser competitivos en un mercado abierto e internacional en el que los agricultores a título individual somos muy poco.

En esta línea, desde UPA Aragón seguimos apostando firmemente por las denominaciones de origen y de calidad como uno de nuestros principales valores. Estos sellos hacen que se reconozca no solo la calidad de nuestros productos, sino la singularidad de cada uno de ellos y de nuestro territorio. Por ello, desde UPA Aragón seguimos impulsando la certificación de productos aragoneses.

La importancia de las mujeres rurales

Otro de los pilares fundamentales para UPA Aragón es la mujer. Reforzar el protagonismo de la mujer rural en la responsabilidad de las explotaciones agrarias familiares es una de nuestras luchas. La titularidad compartida no ha calado en Aragón, por falta de publicidad y por las peculiaridades de nuestra norma, pero eso está cambiando. A través de FADEMUR también estamos trabajando para que la mujer ocupe el lugar que merece y el que le debemos por derecho. A través de la formación y de talleres informativos en todo el territorio estamos dando a conocer a las mujeres aragonesas las posibilidades que tienen a su alcance para emprender, así como los recursos de los que disponen para poner en marcha su propio empleo, bien sea como autónomas o en cooperativas. La mujer sigue siendo, por tradición cultural, el eje de la familia en el mundo rural y, por lo tanto, en los pueblos. Por ello estamos trabajando para que le sea reconocido administrativa y legalmente su trabajo individual y personal en las explotaciones familiares a lo largo de los años, y poniendo ante ellas una nueva realidad laboral, con la puesta en marcha de empleo autónomo de calidad, reconociendo así su independencia económica y la necesidad del reparto equitativo de las cargas familiares, tan patentes en el medio rural.

En UPA Aragón somos más que una organización agraria; somos agricultores, ganaderos, profesionales del campo que habitamos en el medio rural y que luchamos día a día para alcanzar aquello a lo que aspiramos: a vivir dignamente de nuestro trabajo.