Las Cortes reclaman “mejores infraestructuras”, ayudas económicas y cursos de formación para mejorar la situación del ganado extensivo en la Comunidad

La proposición no de ley presentada por el PAR sobre la situación del ganado extensivo ha contado con el voto positivo de todo el hemiciclo aragonés, una iniciativa donde la formación aragonesa ha pedido al Gobierno aragonés, entre ocho cuestiones, poner en marcha “un plan de puesta en valor de las razas autóctonas”

Fecha: 06-Oct-2017

Tags: ganadería

El Pleno de la Cámara ha dado luz verde a una iniciativa de impulso del Partido Aragonés en la que este grupo ha reclamado el apoyo a la ganadería extensiva, a través de ocho puntos. En este sentido, Lucía Guillén (PAR) ha desarrollado alguna de estas intenciones como la mejora de las infraestructuras para el ganado, el desarrollo de un Plan de Puesta en Valor de las razas autóctonas aragonesas o la creación de ayudas para la contratación de pastores y para los propios ganaderos por el servicio medioambiental que prestan.

En este debate también han participado los diputados Miguel Ángel Navarro (PP), el socialista Herminio Sancho, Andoni Corrales, de Podemos, Ramiro Domínguez (Ciudadanos) y Patricia Luquin, del Grupo Mixto-IU.

El texto final ha sido el siguiente:

“Las Cortes de Aragón instan al Gobierno de Aragón a:

1.- Mejorar las infraestructuras y estructuras destinadas a la atención del ganado extensivo en los pastos de montaña, tales como vallados, mangas, puntos de agua, cabañas o refugios, infraestructuras básicas para el buen manejo del ganado con comodidad, pistas, etc.

2.- Articular un Plan de Puesta en Valor de las razas autóctonas aragonesas que permita, por un lado, mejorar la cabaña ganadera aragonesa mediante el fomento de esas razas y de los sistemas extensivos de producción bajo parámetros de respeto al entorno natural y al bienestar animal, y por otro, la puesta en valor de los productos obtenidos de ellas, apoyando por igual a todas las producciones. Ese Plan se traducirá, entre otras cosas, en un apoyo directo a los ganaderos que mantienen un patrimonio genético aragonés con gran potencial estratégico para diferentes situaciones futuras que nos podamos encontrar, cambio climático, epidemias, adaptación al medio de las razas autóctonas, etc.

3.- Establecer una partida presupuestaria en el presupuesto de 2018 y un sistema de ayudas para la contratación de pastores o vigilantes del ganado, destinado a agrupaciones de ganaderos de extensivo. Algo que serviría también como una fórmula para fomentar el empleo en el medio rural, recuperando una figura tan emblemática como la de los pastores.

4.- Establecer a través de la Ley de acompañamiento de 2018 o de la Ley de presupuestos del próximo año 2018, un sistema de ayudas económicas a los ganaderos de extensivo por los servicios ambientales que presta la ganadería extensiva. Servicios de manteniendo los mosaicos de pastizales, matorrales y bosques del territorio aragonés; de prevención de incendios forestales; de generación de productos alimentarios de primera calidad tales como carnes, quesos, leche, y otros productos; y de contribución al mantenimiento de las poblaciones de otras especies de fauna silvestre.

5.- Realizar un estudio de los pastos de montaña que permita obtener las cargas de pastoreo óptimas para el mantenimiento de los ecosistemas.

6.- Desarrollar, en base al estudio anterior un sistema de control autonómico del aprovechamiento de los pastos de montaña, que permita exigir que la carga ganadera de cada municipio de montaña se acerque, en lo posible, a la carga de pastoreo óptima determinada por el estudio, con el fin de evitar situaciones de infra pastoreo.

7.- Planificar desde el CITA cursos de formación específica dirigidos a ganaderos de extensivo orientados a que los asistentes adquieran técnicas y métodos de trabajo que les permitan mejorar la rentabilidad de las explotaciones de ganadería extensiva.

8.- Reconocer la ganadería extensiva como una actividad esencial para el futuro del territorio aragonés, y poner en valor al ganado y a los ganaderos, que, a través de su dedicación, mantienen la naturaleza y el entorno de los municipios aragoneses en un estado óptimo.