Innovación e internacionalización del Ovino y caprino de carne

Poco a poco las producciones de carne de ovino-caprino en España van mejorando su valor en origen, aunque aún se encuentran lejos de lo alcanzado hasta 2007. La persistente caída del consumo interno parece haberse frenado y continúa la mejoría del sector exportador, tanto de animales vivos, como de carne fresca.

Fecha: 23-Oct-2018

Fuente: Euroganaderia

Durante el pasado año, según las macromagnitudes del Ministerio de Agricultura, el valor corriente a precios básicos de la producción de ovino y caprino de carne en origen alcanzó 1.243,3 millones de euros, un 3,2% más que en 2016, pero un 15,4% por debajo que en 2007. Este valor equivale a un 62,3% del valor de la producción total de este sector; un 6% del valor total de la Producción Final Ganadera (PFG) y un 2,5% del de la Producción Final Agraria (PFA).

Explotaciones y censo ovino

El número de explotaciones ganaderas de ovino de reproducción para producción de carne era de 90.764 a 1 de enero de 2018, un 79% de todas las granjas, aunque habría que sumar otras 10.067 más de aptitud mixta (carne/leche). Desde 2007, el número de granjas de ovino de carne ha bajado un 4,75% y en unas 4.500. Un 19,7% de todas las explotaciones de ovino (carne, leche u otras) estaba en Galicia, con 22.607, seguido de Andalucía (18% y 20.664); Extremadura (14,5% y 16.642); Castilla y León (9,6% y 10.966) Castilla-La Mancha (5,7% y 6.590); Asturias (5,65% y 6.435), País Vasco (5,6% y 6.472), etcétera.

El censo de ganado ovino estaba constituido a principios de año por un total de 16,77 millones de cabezas. Un 22,1% del total y 3,7 millones en Extremadura; un 18,3% y cerca de 3,1 millones en Castilla y León; un 15,9% y casi 2,66 millones en Castilla-La Mancha, un 14,4% y 2,41 millones en Andalucía; un 10,4% y 1,74 millones en Aragón, etcétera.

Cabras
Por su aptitud reproductiva, un 57% y cerca de 9,1 millones de cabezas eran en 2017 ovejas y corderas cubiertas para aptitud cárnica; un 15% y casi 2,43 millones eran ovejas y corderas cubiertas para ordeno; otro 4% y 691.812 eran ovejas no cubiertas, y otro 25% corderos y sementales, con casi 3,76 animales.

El censo de ganado ovino en la Unión Europea era de 85,4 millones de animales a finales de 2017 Un 27% y 23,3 millones estaban en Reino Unido, ocupando España el segundo lugar, con un 19% y 15,96 millones. Tras España, los siguientes por importancia eran Rumania (12% y 9,98 millones); Grecia (10% y 8,59 millones); Italia (8% y casi 7,22 millones), Francia (8% y casi 7,22 millones), etcétera.

Explotaciones y censo caprino

El número de explotaciones de cabras de reproducción para producción de carne era a 1 de enero de 2018 (SITRÁN) de 56.013, lo que equivale al 72,5% del total (77.299), con un descenso del 1,54% respecto al año anterior, pero con un aumento del 19,6% sobre las que había en enero de 2007 (49.342). A éstas habría que añadir otras 10.010 granjas de aptitud mixta (carne/leche). De este último número total, un 29% y 22.606 estaban en Galicia; otro 22% y 16.878 en Andalucía; un 10% y 8.060 en Extremadura; un 5% y 4.094 en Aragón; otro 5% y 3.619 en Castilla-La Mancha, etcétera.

Desde 2008, el número total de explotaciones de caprino aumentó un 7,8% y en más de 5.600 granjas. El número más bajo en ese periodo fue el del año 2012, con 65.981. Desde entonces el sector se recuperó, marcando un máximo de 78.756 granjas al principio de 2016.

 

El sector ganadero de caprino contaba con 2.929.223 cabezas en 2017, de las cuales un 37,8% y algo más de 1,1 millones estaban en Andalucía; otro 15,3% y 447.185, en Castilla-La Mancha; un 10,5% y 308.494 en Extremadura; un 9% y 263.252 en la Región de Murcia; un 7,4% y 216.026 en Canarias;  un 5,3% y 155.441 en Castilla y León, etcétera.

El número de cabezas de ganado caprino se redujo ligeramente en 2017 (censo de noviembre), un 0,92%, hasta 3.059.731, tras llegar al máximo de 3.088.035 cabezas. Unos 2,43 millones eran hembras para vida y 624.953 chivos y sementales.

El censo caprino en la UE estaba formado en 2017 por 12,24 millones de cabezas, de las que un 30,8% y casi 3,77 millones estaban en Grecia, ocupando en segundo lugar España, con un 25% del total. En tercer lugar, Rumania, con un 12,3% y 1,5 millones; Francia, con un 9,9% y 1,21 millones; Italia, con un  8,1% y 992.000 cabezas, etcétera.

Producción de carne de ovino

Durante el pasado año, la producción de carne de ovino en España se elevó a 115.114 toneladas de peso canal, con un descenso del 1,66% respecto al año anterior (117.054 tm). Desde el año 2005, en que la producción de este tipo de ganadería alcanzó las 224.126 tm de peso canal, la producción ha ido disminuyendo hasta un mínimo de 112.464 tm en 2012, recuperándose desde entonces. El máximo desde el año 1986 se marcó en el año 2002, con 237.000 toneladas de carne producida.

Casi un 25% de la producción cárnica de ovino estaba en Castilla y León, con 28.738 toneladas de peso canal, seguido de Castilla-La Mancha (14,3% y 16.446 tm); Región de Murcia (10,2% y 11.725 tm), Aragón (9,5% y 10.968 tm); C.Valenciana (7,87% y 9.059 tm); Andalucía (6,4% y 7.344 tm) etcétera.

Producción de carne de caprino

La producción de carne de caprino en 2017 fue de 10.713 toneladas de peso canal, con  un aumento del 8,2% sobre un año antes (9.904 tm), tras sacrificarse cerca de 1,36 millones de animales. El máximo desde 2005 se marcó en 2011, con un total de 11.142 toneladas y el mínimo en 2014 con 8.553 toneladas. Desde el año 1986, el máximo de producción de carne de caprino se logró en ese año, con 17.734 tm y algo más de 2 millones de cabezas.

Un tercio del total de esta producción cárnica se produjo en Andalucía, con 3.535 tm, seguido de Canarias, con casi un 18% y 1.895 tm; Región de Murcia (12,65% y 1.355 tm); Castilla-La Mancha (12% y 1.289 tm); Castilla y León (8,53% y 914.000 tm), etcétera.

La producción de carne de ovino y de caprino en la UE en 2017 fue de 754.500 toneladas peso canal, con un aumento del 1,1% sobre el año anterior. España contribuyó con un 16,7% del total y 125.700 toneladas (115.000 tm de ovino y 10.700 tm de caprino).

El primer productor de carne de ovino-caprino en 2017 fue Reino Unido, con 297.770 tm (39,5%) de peso canal, con un alza del 2,63%, ocupando España (16,8% y 125.500 tm) el segundo puesto, Francia (11,7% y 86.930 tm), Grecia (9,6% y 71.320 tm); Irlanda (9% tm y 67.120 tm); Italia (4,6% y 25.030 tm), etcétera.

Comercio exterior

Nuestro país es netamente exportador de ovino y caprino de carne, cuya evolución ha ido en aumento, sobre todo con destino a países terceros en los últimos años. Esta ha sido una salida natural, ante la persistente caída del consumo interno, que parece haberse frenado también en los últimos años, tras las campañas de promoción realizadas por la interprofesional Interovic, con la aparición de nuevos cortes y nuevas presentaciones más adaptados a la demanda y al gusto del consumidor de hoy.

Durante el pasado año, la exportación total de productos de ovino y caprino de carne, que incluye animales vivos y carne fresca, refrigerada y congelada, alcanzó las 87.355 tm (-1,4% respecto a 2016) por importe de 290,54 millones de euros (-4,1%), de las que 50.485 tm por valor de 140,26 millones, fueron a parar a países extracomunitarios y 36.870 tm por valor de 150,3 millones a otros países de la UE.

Francia concentró un tercio de todos los envíos de carne de ovino español en 2017, con 11.585 toneladas sobre un total de 34.790 tm, seguido de Italia (12,8% y 4.452 tm), Argelia (5,3% y 1.847 tm); Reino Unido (5,2% y 1.825 tm); Países Bajos (4,9% y 1.717 tm), Dinamarca (4% y 1.402 tm), Hong Kong (3,7% y 1.294 tm); Portugal (3,5% y 1.210 tm), Emiratos Árabes (3% y 1.036 tm), etcétera.

En cambio, las importaciones hacia el mercado español fueron de 12.792 tm  (-8,43% sobre 2016), por valor de 64,3 millones de euros (-6,9%), de las que la mayor parte, con 11.491 tm por valor de 56,43 millones, llegaron de otros países de la UE y 1.301 tm por valor de 7,86 millones de países terceros.

Las importaciones de carne de ovino, con 8.180 toneladas en 2017, llegaron en un 30% de Italia, con 2.455 tm, seguido de Grecia (16,2% y 1.326 tm), Francia (13,9% y 1.140 tm) Nueva Zelanda (9,5% y casi 777 tm); Países Bajos (7,8% y 637 tm), Reino Unido (6,1% y 497,5 tm), etcétera.

Por otro lado, del total de 2.385,2 toneladas exportadas de carne de caprino en 2017, casi un 37% y 880,3 tm tuvieron como destino Francia, seguido de Reino Unido (16,8% y 400,8 tm); Portugal (10,1% y 241,2 tm); Italia (9,7% y 232 tm) Países Bajos (8,3% y 199 tm), República Centroafricana (4,5% y 107 tm), etcétera.

Por último, de las escasas 218,3 toneladas de carne de caprino importadas en 2017, un 38,2% y 83,4 tm llegaron de Francia; casi otro 30% y 64,9 tm de Grecia; casi un 15% y 32,7 tm de Alemania; un 10,2% y 22,3 tm de Países Bajos, etcétera.

Animales vivos

En 2017 se importaron 342.162 animales vivos de ovino y caprino, un 14,2% más que en el año anterior, por valor de 15,7 millones de euros (+1%), aunque el máximo desde el año 1999 lo marcó precisamente ese año con 587.442 cabezas y casi 25,6 millones facturados.  

En cambio, se exportaron en 2017 un total de 1.118.334 animales vivos, un 0,3% menos que en el año anterior, por importe de algo más de 136 millones de euros (-11,4%), pero 2016 marcó un récord de 1.121.326 cabezas exportadas por valor de casi 153,6 millones de euros.

Un 73,6% de los envíos, con  820.512 ovinos vivos, se realizó a Libia; otro 8% y 80.012 animales con Portugal; otro 7,2% y  80.219, con Francia; un 4,4% y 48.591, con Italia; un 3,4% y 37.574 con Alemania, así como partidas inferiores con Eslovaquia (19.142), Líbano (15.587) y Dinamarca (3.881).

De las 336.943 cabezas de ovino que llegaron a nuestro país, un 89,1% del total vino de Francia, con 300.146, seguido de Portugal (7% y 23.622 animales), Italia (1,8% y  6.131 cabezas), Rumania (1,8% y  6.087) y  partidas menores de Grecia (690) y de Irlanda (264).

De los 3.536 caprinos vivos que se exportaron en 2017, un 56,5% tuvo como destino Irán, con 1.998 cabezas, otro 25%, Italia, con 879; un 10,7% la República de Montenegro, con 378, a lo que hay sumar partidas menores a Líbano (80); Portugal (75) o Francia (69).

De los 5.225 caprinos vivos importados, casi en su totalidad (97,4%) vinieron de Portugal, con 5.087 animales, junto con otros 132 (2,5%) de Francia.

Consumo de carne

El consumo nacional de carne de ovino y caprino fresca sigue siendo, sin duda, el principal problema al que continúa enfrentándose este sector. Su evolución durante los últimos años es bastante negativa. En 2007, los hogares consumieron 119.900 toneladas de este tipo de carne, diez años después, este consumo había caído a 68.116 tm, según el panel de consumo del Ministerio de Agricultura, un 43,2% menos, en una tendencia bajista que parece no tener freno.  En aquel año, el consumo per cápita era de 2,67 kilos, bajando en el pasado año era de 1,46 kilos.

Los esfuerzos de la interprofesional de este sector ganadero, Interovic, se centran precisamente de recuperar ese consumo, sin descuidar la faceta del mercado exterior (entrada en China, por ejemplo), a través de campañas de promoción que se centran en nuevas y hasta imaginativas presentaciones del producto, más adaptadas a la demanda y a los consumidores, y en el trabajo en el canal de distribución minorista (carnicerías, mercas…etc.).

Según el balance de aprovisionamiento de carne de ovino y caprino en España, frente a una producción (dato provisional) de 125.511 toneladas en 2017, las importaciones (carne + despojos) fueron de 8.625 tm y las exportaciones de 41.405 tm, con un consumo interno total aparente de 92.731 toneladas. El grado de autoabastecimiento de este tipo de carne era de 135,35%, es decir, la oferta disponible (producción + importación – exportación) era un 35,4% superior a lo que somos capaces de consumir, con apenas 1,99 kilos per cápita (dato provisional) muy lejos de los 5,71 kilos per cápita del año 2003.

No obstante, se ha logrado frenar el descenso en estos últimos años, puesto que en 2014 era de 1,97 €/kilo, superándose los 2 kilos p.c. en los dos siguientes años. Otras fuentes estadísticas, sin embargo, recortan el consumo por habitante y año a menos de 2 kilos desde 2012, dejándolo en apenas 1,46 kilos per cápita en 2017, mínimo histórico.