Genes del tomate ayudarían a mejorar cultivos resistentes a sequías

Un estudio realizado por investigadores del Laboratorio Sainsbury y Departamento de Ciencias de las Plantas, de la Universidad de Cambridge, en Inglaterra, descubrieron que el estrés por sequía desencadena la actividad de “genes saltarines” (retrotransposones de jinete) en el tomate.

Fecha: 12-Nov-2019

Tags: tomate , sequía

Fuente: Portalfruticola

Este tipo de genes contribuyen a la forma y color de la fruta del tomate; pero también están presente y activos en otros cultivos.

Lo interesante de los genes saltarines, según los descubrimientos de los investigadores, es que presentan un potencial como fuente de nuevas variaciones de rasgos.

De tal manera que ayudarían a las plantas a enfrentar las condiciones más extremas impulsadas por el cambio climático.  “Los genes transposones tienen un enorme potencial para mejorar los cultivos”, afirmó el investigador Matthias Benoit a ScienceDaily.

Transposones 

Llamados de manera más común como genes saltadores, son fragmentos móviles de código de ADN, que pueden copiarse en nuevas posiciones dentro del genoma (código genético de un organismo).

Estos pueden cambiar, alterar o amplificar genes o no tener efecto alguno. Desde su descubrimiento, en la década de 1940, fueron considerados como “ADN basura”; y solo ahora los científicos se dieron cuenta de que pueden ser útiles.

Esto porque, según el estudio, juegan un papel importante en el proceso evolutivo; y en la alteración de la expresión génica y las características físicas de las plantas.

El uso de los genes

Según los investigadores, el uso de estos genes saltadores, ya presentes en las plantas para generar nuevas características, sería “un avance significativo de las técnicas de mejoramiento tradicionales”.

El uso permitiría crear de manera bastante rápida nuevos rasgos en los cultivos para que la cosecha sea más eficiente y maximizar el rendimiento.

De esta manera, habría una inmensidad de nuevos rasgos que podrían ser refinados y optimizados, a través de tecnologías de selección genética.

El uso de los genes saltadores es un método de reproducción libre de transgenes; reconocidos por la legislación actual de la UE en relación con organismos genéticamente modificados.

 No solo presentes en el tomate

La investigación reveló, además, que estos genes también están presentes en varias especies de plantas.

“Esta amplia abundancia fomenta nuevas investigaciones sobre cómo puede activarse de manera controlada, o reactivarse/reintroducirse en plantas que actualmente tienen elementos de genes saltadores mudos para recuperar el potencial”, concluyó el estudio.

“Identificar que la actividad se desencadena por la sequía sugiere que puede crear nuevas redes reguladoras de genes; que ayudarían a una planta a responder a la sequía", afirmó Benoit.

“Proporcionan una respuesta a la sequía a los genes que ya están presente en los cultivos. Algo particularmente significativo en tiempos de calentamiento global; donde existe una necesidad urgente de producir cultivos más resistentes”, puntualizó Benoit.