Así, en los nueve primeros meses del año y según los datos oficiales de Comercio Exterior Español, entidad dependiente del Ministerio de Economía y Competitividad, se ha subido ligeramente hasta las 30.000 toneladas exportadas. Por su parte, las importaciones han descendido aproximadamente desde las 6.000 a las 5.000 toneladas de producto.

En el ámbito de las exportaciones, Francia e Italia siguen siendo los principales destinos de la carne de ovino española, aunque ambos han reducido sus compras en el presente año, en un 21,7% y 11,8% respectivamente. También disminuyen Grecia (-35,7%) y Portugal (-21,9%), mientras que destaca el importante incremento que se ha registrado en Países Bajos (+80,7%) y en el capítulo de ‘otros países’, con un incremento del 70% que demuestra la apertura de fronteras lograda por la carne de cordero producida en España.

Respecto a las importaciones, Italia arrebata el primer puesto a Nueva Zelanda como proveedor del mercado español, debido a un incremento importante del país europeo (+87,8%) y un descenso del oceánico (-65,5%). En el resto de países, destaca la consolidación de Grecia (+39,9%) y Francia (+28,3%) y las reducciones en Chile (-70%) y Argentina (-22,5%).