El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, considera que las ayudas acordadas por la Comisión Europea (CE) para el sector agroalimentario son “un paso adelante positivo, pero insuficiente” para aliviar la crisis que ha generado la pandemia del coronavirus en el sector agroalimentario y pide más fondos al Ejecutivo comunitario.

Luis Planas hizo esta afirmación en el trascurso de su intervención en la comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación del Congreso de los Diputados, en la que ha dicho que una actuación eficaz requiere la activación de ayudas y, en ese sentido, ha transmitido a la CE la idoneidad de utilizar el fondo extraordinario de crisis, ya existente.

La Comisión aprobó ayudas al almacenamiento privado para algunos sectores, flexibilidad para los programas de apoyo al mercado y excepciones a determinadas normas de competencia de la Organización Común de Mercados.

Otro de los asuntos abordados ha sido la mano de obra para cubrir las campañas hortofrutícolas: según el ministro, a 30 de abril no había puestos vacantes, información que ha sido puesta en duda por algunos grupos de la oposición.

El objetivo del Gobierno es cubrir el 100 por cien de las necesidades de temporeros hasta septiembre por lo que ha incidido en que el Real Decreto vigente se prorrogará si fuese necesario.

Desde la oposición también han pedido que el Ejecutivo permita, al igual que Alemania, la llegada de temporeros desde Rumanía.

A este respecto, Planas ha pedido prudencia y ha detallado que está pendiente de las normativas sobre movilidad que vaya aprobando el Ministerio de Interior.

En el ámbito comercial, ha hecho alusión a la “buena noticia” de que las exportaciones continúen “con normalidad”.

A partir de ahora, a su juicio, hay que seguir ayudando a los agricultores con acciones como profundizar en la mejora del funcionamiento de la cadena alimentaria -se tendrá que transponer la directiva comunitaria-; conseguir una nueva PAC que, al menos, mantenga los fondos de la previa o potenciar la integración a nivel de la producción.

Para el ministro, el sector primario vive un momento clave porque la sociedad lo ha redescubierto como estratégico al proporcionar economía, empleo, protección medioambiental y futuro.