Los consumidores españoles han pagado en el mes de noviembre los calabacines 5 veces más caros de lo que los han cobrado los agricultores, según el Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos (IPOD) correspondiente a ese mes, que elaboran cada mes la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la Unión de Consumidores de España (UCE) y la Confederación Española de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEACCU).

Ese índice de precios recoge en noviembre un precio pagado al productor de calabacín de 0’42 euros por kilo mientras el consumidor lo ha pagado a 1’81 euros por kilo, con un margen comercial del 331 por ciento, multiplicando su precio por 4’31 veces.

Más alto aún ha sido en ese mes el margen con el que la distribución ha gravado a la lechuga, ya que el agricultor cobró cada unidad a 0’16 euros, mientras que el consumidor pagó 0’94 euros por cada lechuga. El margen comercial que la distribución aplicó a la lechuga en noviembre ha sido del 488 por ciento, haciendo que su precio desde origen a destino se multiplicara en 5’88 veces.

Otras hortalizas

El citado índice de precios fija un 255 por ciento como margen comercial para el pepino en el mes de noviembre, siendo en ese mes el precio medio pagado al agricultor de 0’44 euros por kilo, mientras que el consumidor lo ha pagado a 1’56 euros/kilo, multiplicando su precio en origen por 3’55 veces.

Los consumidores españoles de pimiento verde han pagado en el mes de noviembre un 229 por cien más de lo que han percibido los productores, ya que el precio medio pagado al agricultor por ese tipo de pimiento ha sido de 0’66 euros por kilo, mientras que el consumidor lo ha pagado a 2’17 euros/kilo, multiplicando su precio en origen por 3’29 veces.

En cuanto al rojo se ha pagado en origen a 0’60 euros por kilo como precio medio, mientras que al consumo llegó con un precio de 2’36 €/kg., 3’92 veces más, con un margen comercial del 292 por ciento.

El precio percibido por el agricultor al vender berenjenas ha sido de 0’60 euros por kilo mientras que el consumidor las pagó a 1’84, con lo que su precio medio en origen se multiplicó en 3’07 veces, con un margen comercial del 207 por ciento.

El tomate multiplica su precio en 3’04 veces desde el productor al consumidor. Su margen comercial es del 204 por ciento, con un precio pagado al productor de 0’69 euros por kilo, mientras que el consumidor lo ha pagado a 2’10 euros/kilo.