Agricultura de conservación es el cambio necesario para la sostenibilidad

Desde este lunes y hasta el 10 de noviembre se celebra en Cuba el coloquio internacional «Agricultura de Conservación y Agroecología»

Fecha: 08-Nov-2017

Lisandra Fariñas Acosta

«¿Es posible modificar la manera de hacer la agricultura y garantizar a su vez el necesario incremento de la producción y contribuir a la buena nutrición de las personas?». La reflexión la lanzó Theodor Friedrich, representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Cuba, durante el coloquio internacional «Agricultura de Conservación y Agroecología»; que desde este lunes y hasta el 10 de noviembre celebra el Ministerio de la Agricultura (Minag) con el apoyo de la FAO y la Unión Europea.

«La respuesta es sí, se puede. Las técnicas y prácticas promovidas por la FAO con la intensificación sostenible de la producción agrícola permiten incrementar el rendimiento con menos costos; aumentar la eficiencia del uso de los insumos y reducir los efectos ambientales negativos de la producción de alimentos. Esto constituye un nuevo paradigma de producción agrícola intensiva que es a un tiempo sumamente productivo y sostenible desde el punto de vista ambiental», sostuvo Friedrich.

Y justamente ahí radica el desafío y la utilidad del encuentro, que tiene como base la necesidad establecida en los documentos de la política económica de Cuba, de aumentar la producción agrícola, respondiendo al mismo tiempo a las amenazas del cambio climático, la degradación de los recursos naturales y del medio ambiente.

Fortalecer las capacidades, acordar sitios de intervención y acciones priorizadas por provincias, en correspondencia con las diversas formas de producción, identificar actores claves a nivel local para desarrollar la Agricultura de Conservación y la Agroecología, entre otros elementos son los propósitos de este coloquio, que constituye la continuidad de la Consulta de Expertos internacionales sobre Agricultura de Conservación (AC)celebrada en La Habana en octubre del 2016.

De acuerdo con Dagoberto Rodríguez Lozano, Jefe del Departamento de Suelos y Fertilizantes del órgano central del Minag, del coloquio anterior –que contó con los aportes de 113 expertos nacionales, 31 expertos extranjeros, con gran experiencia en el desarrollo y adopción exitosa de la práctica de la agricultura de conservación en América Latina, Asia, África, América del Norte, Europa y Oceanía– emergió como resultado principal una «Hoja de Ruta» para el desarrollo y la adopción de la AC en Cuba, y el levantamiento de demandas y prioridades.

«La continuidad que se le ha dado a la misma, evidencia la voluntad del Ministerio de la Agricultura y de los organismos internacionales que nos acompañan, de continuar promoviendo acciones en varios niveles, así como el intercambio entre decisores, especialistas y productores de diversas instituciones que les corresponde la responsabilidad de promover, generar y regular tecnologías para el uso y manejo del suelo, el agua y el bosque en Cuba», explicó Rodríguez Lozano.

Asimismo, subrayó la importancia de la reciente creación de un grupo interministerial para la atención e inserción de este programa, pues «cambiar la mentalidad para hacer la agricultura que se requiere el día de hoy no puede ser una tarea de un solo organismo».

Frente a ese reto la FAO en Cuba ha unido esfuerzos con la Unión Europea para apoyar al Minagen la adopción de la AC, que es un eje clave de una Agricultura Sostenible y Agroecológica, destacó Friedrich.

«Digo un eje clave, porque una agricultura sostenible requiere de la agricultura de conservación, junto con el uso de buenas semillas de variedades adaptadas, el manejo integrado de plagas, la nutrición vegetal basada en suelos sanos, una gestión eficaz del agua y la integración de cultivos, pastizales, árboles y el ganado», apuntó el representante de la FAO en el país.

Por su parte, el señor Alberto Navarro González, Embajador de la Unión Europea en Cuba, manifestó la satisfacción de contar desde hace unos días, con el acuerdo de diálogo político y cooperación entre Cuba y la UE.

Fueron demasiados años sin un marco contractual que regulara nuestras relaciones y afortunadamente desde el primero de noviembre eso cambió, dijo, al tiempo que subrayó la importancia que tiene Cuba para Europa.

«Pronto en Alemania estaremos inaugurando la Conferencia mundial de Lucha contra el cambio climático, donde estaremos mano a mano impulsando esos trabajos. La UE apoya el desarrollo sostenible, la lucha contra el cambio climático y sin dudas respaldamos sin reservas una agricultura mucho más racional en la utilización de sus recursos naturales», refirió el embajador.

Las realidades del cambio climático y las vulnerabilidades de nuestro país ante ellas hacen aún más perentorio la introducción de sistemas de manejo agrícola que protejan los suelos, economicen el uso del agua, disminuyan la carga contaminante y eleven los rendimientos agrícolas con productos de mejor calidad, puntualizó el Jefe del Departamento de Suelos y Fertilizantes del Minag.

De estas acciones, en consonancia con la Tarea Vida, de lo que hagamos con responsabilidad y compromiso dependerá que la agricultura cubana inicie un cambio hacia su sostenibilidad, y por supuesto, el legado que dejaremos a las futuras generaciones.